La última semana que publiqué fue brutal!! No sólo salió la nota y estaba aprobada :D Ya soy licenciado!!! Sino que además ese mismo día me llegó un paquete de Japón bastante caro que llevaba dos meses esperando y ya estaba con movidas con el vendedor, un día antes fue la presentación de la nueva Xbox que fue un puto desastre, y el sábado el Bayern ganó la Champions, es decir todo justo como yo quería :D Así que a ver si esta semana que toca el E3 y la Copa Confederaciones también salen las cosas bien ^^
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PD: Y ahora me voy a dormir, que son las 5 y media de la mañana xD
PD: Y ahora me voy a dormir, que son las 5 y media de la mañana xD
Episodio CLIII
E
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l profesor se
palpó la mejilla y la nariz después de limpiarse. Ya no sangraba, pero notaba
una evidente inflamación en su rostro, que probablemente permanecería ahí
durante el resto del combate. El golpe del caballero había sido certero, y por
poco no le hizo añicos las gafas. Sabía que había tenido suerte, pero al fin y
al cabo, la suerte es parte de la victoria.
“Está bien. Has
anulado mi teletransporte completamente, te felicito por demostrar que mis
esfuerzos por darte una razón para hacerte más fuerte no han sido en vano. Sin
embargo, has de saber que no necesito para nada el Shunkanido para derrotarte, era sólo mera diversión. Ahora que me
has hecho ver que merece la pena molestarme contigo, podré mostrarte un poco de
mi auténtica fuerza”.
“¿Sólo un poco?
¡Deja de flipar! ¡Sabes perfectamente que si tú no te empleas a fondo tampoco
tendrás ninguna oportunidad contra mí!”
“Pues vamos a
comprobarlo”.
Mesa tenía prisa
por mermar la autoestima de su adversario, así que tomó la iniciativa, actitud
que no es usual en él. Fidel le esperaba en guardia, sabía lo que le tocaba
ahora. Era el caballero de la tierra, y su atributo la resistencia. Eso era con
todo lo que contaba para ser capaz de ganar el combate.
Fidel también se
lanzó al ataque. Por mucho que resistiera su cuerpo, sabía que necesitaba
golpear para vencer, y cuanto antes lo hiciera mejor. Lo único que podía hacer
era confiar en que su entrenamiento y fuera suficiente como para aguantar hasta
el final.
Decidido, llevó
el puño al frente, lo mismo que estaba haciendo su adversario. En realidad,
ninguno de los dos estaba tratando de alcanzar al otro, era un simple pulso de
poder, una manera de marcar la delantera en el combate, una prueba de voluntad,
confianza y determinación.
Los puños
chocaron y el impacto produjo un forcejeo entre ambos. La onda expansiva liberó
un fuerte viento, pero en aquel claro inhóspito, tan sólo una leve polvareda se
dio cuenta de su presencia.
“Lo hice… ¡Lo
hice! – Exclamaba el caballero de la tierra para sus adentros – ¡He conseguido
igualar el poder de ataque de Mesa!”
“Como me
imaginaba…” susurró su adversario.
En un instante, Mesa
aplicó mucha más fuerza a su ataque. Fidel no pudo hacer otra cosa que ver como
retrocedía su brazo, hasta que finalmente fue rechazado de su trayectoria y el
puño de Mesa se abrió paso hasta su cara, golpeándole con violencia, y la
potencia fue suficiente como para hacerle caer al suelo. Su cuerpo se arrastró
por la tierra un par de metros, y tras eso se quedó unos segundos conmocionado.
“Como me
imaginaba… – continuaba Mesa – Sigues siendo muy débil”.
“Grrr… – el
caballero levantó la cabeza del suelo. Sangraba por la parte derecha de la boca
y tenía parte de la cara llena de tierra – ¡Ha sido mala suerte! ¡A la próxima
te vas a enterar!”
“Parece que no
aprendes… Pero el deber de un buen profesor es continuar transmitiendo sus
enseñanzas al alumno, porque la vida sin la enseñanza no es más que un
desierto”.
Fidel se levantó
rápidamente y corrió de nuevo al ataque, esta vez portando su espada. Alzó la
hoja hacia arriba y trató de asestar un espadazo al cuello de su oponente. Sin
embargo, Mesa detuvo el ataque agarrando el filo de la espada con sus propias
manos, sin ningún esfuerzo aparente.
“Vamos, sigue
intentándolo – le decía mientras le miraba fijamente a los ojos, mientras
contemplaba su cara de esfuerzo, tratando de aplicar más fuerza en su espada
para, al menos, conseguir cortarle en la mano – Este combate es el oasis que
tanto necesitaba el desierto de tu ignorancia. Hoy aprenderás que no tienes
nada que hacer contra mí, sin importar cuanto te esfuerces. Será la lección más
importante de tu vida, y la última. El fuerte siempre prevalece frente al
débil”.
Con la otra
mano, volvió a golpear a Fidel, esta vez en el estómago. Su cuerpo volvió a
salir disparado, ahora hasta el extremo del claro en el combatían, donde se
estrelló contra el tronco de un árbol y rebotó contra el suelo. Su espada había
quedado en poder de Mesa, quien seguía sosteniéndola por el filo.
“Disculpa, no
pretendía arrebatarte tu espada. Toma, te la devuelvo”.
Mesa lanzó la
espada del caballero contra él. Debido al golpe, Fidel no había podido hacer
caso a las palabras de su adversario. Apenas escuchó un murmullo, levantó la
mirada suavemente y la hoja de su espada se clavó en la tierra delante de sus ojos,
a escasos centímetros de su cabeza.
Fidel se levantó
lentamente. No estaba herido, pero el dolor del último golpe todavía no había
desaparecido. Utilizó la espada como apoyo para ponerse en pie, y volvió a
mirar a su objetivo, el cual se mantenía firme e inamovible.
“Tienes razón en
lo que dices, el fuerte siempre prevalece sobre el débil. La naturaleza siempre
funciona de esa forma. Hay gobernantes en los cielos, señores de los océanos y
emperadores de la tierra. Sin importar qué mundo sea, siempre hay un rey al
cual le pertenece. Pero incluso el león, el rey de las bestias, no puede volar
ni nadar, ni mucho menos atacar a los animales que están bajo tierra, como el
topo. Es decir, que una vez el topo está bajo tierra, puede incluso vencer a un
león”.
Dicho aquello,
Fidel dio un puñetazo al suelo con mucha fuerza. La tierra se levantó a su
alrededor, y quedó rodeado de rocas y tierra, sin que su adversario pudiera
verle.
“¿Huyes? Me
decepcionas, caballero…”
Mesa tomó la
iniciativa y avanzó hasta donde se escondía el caballero, rompiendo la pared de
tierra que lo cubría de una patada. Sin embargo, él ya no estaba allí. Lo único
que había era un agujero sin fondo.
“Me ha
engañado…”
El brazo del
Fidel emergió del suelo, agarró con fuerza la pierna de Mesa y le arrastró
hasta el subsuelo para golpearle bajo tierra, moviéndose a gran velocidad de un
lado a otro, tal y como había hecho con Arturo. Consiguió alcanzar a Mesa con
sus ataques en un par de ocasiones, debido al factor sorpresa, pero para cuando
venía a darle la tercera, Mesa salió volando aprovechando el agujero por el que
le habían metido, y el ataque de Fidel pasó de largo.
“Serás… – dijo
cabreado al ver su aspecto – ¡Me has manchado el traje!”
Mesa se quedó en
el aire, esperando a que el caballero de la tierra saliera para enfrentarle,
pero eso no ocurrió. Fidel sabía que bajo tierra estaba en una posición de
ventaja, y no estaba dispuesto a renunciar a ella, mientras que Mesa sabía que en
el aire estaba a salvo, o al menos eso pensaba.
Un montón de
minerales afilados comenzaron a surgir del subsuelo, directos a Mesa, que
decidió no evitarlos, sino destruirlos a golpes para imponer su poder. Al cabo
de varios minutos, la ráfaga de piedras continuaba y no parecía tener intención
de cesar, por lo que Mesa se hartó de hacer tanto ejercicio.
“Se acabó – usó el
Shunkanido para teletransportarse
fuera de la trayectoria de los minerales, y al reaparecer, había cargado una
bola de energía en la palma de su mano - ¡¡Big
Bang Attack!!”
Disparó la bola
de energía, que entró por el agujero por el que había salido Mesa, y un
instante después, estalló en el interior de la tierra. Al encontrarse en el
subsuelo, la onda expansiva de la explosión no pudo liberarse, provocando un
desastre mucho mayor de lo normal. La tierra hizo rebotar la onda expansiva,
multiplicando los efectos de destrucción, y originando un, aunque corto, intenso
terremoto que llegó incluso a sacudir levemente el castillo de la Fiera Deidad.
La superficie de la tierra se agrietó para dejar salir parte de la energía
liberada, ahora en forma de fuego y haces de luz. Por último, el grito del
caballero de la tierra apenas pudo escucharse durante un instante, antes de ser
tragado por el estruendo de la explosión.
“Una serpiente que se arrastra por suelo y sueña con volar, será
devorada por las garras del halcón”.
Tal agitamiento llamó
la atención del castillo. Una figura se asomó a la ventana más alta de la
fortaleza y le hizo una seña a Mesa, para después perderse entre los muros de
piedra del lugar.
“Entendido… De
todas formas no creo que haya sobrevivido. El derrumbamiento interno ha debido
aplastarle y seguro que ha muerto por la presión. Voy a tener que mancharme
otra vez para encontrar su cadáver si quiero llevárselo a Blackron”.
Descendió hasta
el suelo, ahora agrietado completamente, y comenzó a buscar el cuerpo del
caballero entre los surcos de tierra. Por suerte para él, la mano del caballero
volvió a emerger del subsuelo, pero esta vez alejada de su objetivo y con
intenciones muy distintas.
“Increíble…
Admiro tu resistencia, caballero – le decía mientras continuaba viéndole salir
del interior de la tierra, muy lentamente, herido en la cabeza y en varias
extremidades, pero con la moral a la misma altura – Estoy seguro que ningún
otro caballero habría aguantado mi Big
Bang Attack bajo esas condiciones de presión. No creo que hubieran muerto,
pero desde luego, no serían capaces de permanecer conscientes”.
El caballero ya
había terminado de salir, pero faltaba su espada. Volvió a meter la mano por el
agujero por el que había salido y su hoja apareció, toda llena de tierra. Fidel
la sacudió un poco, y acto seguido volvió a empuñarla, apuntando a su objetivo.
“¿No pensarías
que podría matarme mi propio elemento?"
“¿Quieres
continuar? Lo siento pero me han dicho desde arriba, nunca mejor dicho, que
termine con esto ya. El último ataque fue demasiado poderoso y afectó a la
estabilidad del castillo. Si seguimos así podría derrumbarse”.
“¿Intentas usar el
castillo como excusa para huir del combate?” le preguntó Fidel con una leve
sonrisa en la boca.
“Jeje, seguro
que eso te ha funcionado para provocar a mucha gente, ¿verdad? Tan sólo quería
un cambio de emplazamiento, pero está bien. Veo que la inteligencia te persigue
pero tú eres más rápido”.
Mesa se lanzó al
ataque, dispuesto a acabar el combate rápido para no poner más en peligro el
castillo. Fidel tocó el suelo con la palma de su mano, y una barrera de tierra
apareció en el camino de su adversario.
“¡Pierdes el
tiempo! – exclamó Mesa – ¡Esas patéticas técnicas no podrá siquiera frenar mi
ataque!”
Mesa alzó la
pierna, y su brillante zapato, aunque ahora lleno de polvo y tierra, se hizo
paso destruyendo la barrera sin ralentizar su avance. Mesa esperaba que Fidel hubiera
tratado de huir, o de esconderse para atacarle desde algún ángulo concreto. Sin
embargo, para su sorpresa, se lo encontró de frente, espada en mano. Al encontrarse
de nuevo, el caballero dio un fuerte grito a la vez que comenzaba a bajar la
espada para atacar a su objetivo.
Mesa no tenía
tiempo para hacer un contrataque, ya había retirado la pierna con la que había
destruido la barrera de piedra y ahora avanzaba de cabeza contra Fidel, que
estaba cada vez más cerca, así que no se lo pensó dos veces, utilizó su frente
para asestar un potente cabezazo al caballero.
Las dos frentes
chocaron, y también las dos frentes se abrieron una herida mutuamente. A pesar
de que había sido Mesa el que había realizado el golpe no sufrió menos daño,
pero le daba igual, con tal de echar atrás la ofensiva del caballero.
Sonreía, pero no
le duró mucho. A pesar de que le había golpeado tan fuerte como pudo, en esta
ocasión no consiguió rechazarle, sus frentes seguían pegadas, y además podía
ver como la espada continuaba descendiendo rápidamente, quedando muy cerca de
su cuerpo.
No tuvo opción, Mesa
tomó el camino de la prudencia y se retiró unos metros hacia atrás lo más rápido
que pudo, pero no fue capaz de evitar que el corte del caballero de la tierra
le alcanzara levemente en el hombro.
“Su defensa se
ha manifestado cuando lo más necesitaba – analizaba lo que acababa de ocurrir –
Ha despertado su habilidad defensa crítica.
No lo ha hecho a propósito, pero ha sido muy peligroso cada vez podría ser más difícil
tumbarle. Si no acabo rápido, esto podría tomarme más tiempo del que debería”.
“Es extraño…”
“¿Se habrá dado
cuenta?” pensó Mesa al escucharle.
“Esto es muy raro…
– dijo el caballero – Desde hace un rato no siento la presión ésa que decían
que era por vuestra energía, ¿sabes lo que te digo? Eso que hacía que sintiera que mi cuerpo
pesara más y no aguantara mucho tiempo volando… Seguro que es que me he hecho más
fuerte y ya ni lo noto”.
“No…
Definitivamente no se ha dado cuenta en absoluto – pensó y después se puso a
hablar con él – ¿No te explicaron todos
los efectos? ¿O es que creían que deberías haberte dado cuenta tú mismo y por
eso no te dijeron nada? Bueno da igual, te lo explicaré yo, como el gran
profesor que soy.
Efectivamente,
cuando una energía muy intensa domina un área, las personas con una energía
menor, pero con nivel suficiente como para percibirla, se ven abrumadas por ese
poder y sienten esa presión de la que hablas. Sin embargo, esa presión
desaparece cuando una fuerza más o menos equivalente entra en la misma zona. Ahora
mismo, Blackron y el caballero del rayo, Jezabel y el caballero del hielo y
Lardo y el caballero de la rosa, al igual que tú y yo, se encuentran
combatiendo por parejas en lugares diferentes de esta isla, y por eso la presión
ha desaparecido. No es cosa tuya que puedas moverte con libertad, el resto
también pueden hacerlo”.
¿O sea que soy
tan fuerte como tú? ¡Qué bien! ¡Casi es mejor esto que lo que yo pensaba!” sonreía
alegremente.
“No te pongas
contento tan rápido. La presión ha desaparecido porque el conjunto de las energías
es similar, pero en cada pareja sigue habiendo variaciones, una de ellas es la
diferencia abrumadora que existe entre tú y yo, pero puedo decir sin ningún
problema que dos de tus amigos tienen una energía superior a sus adversarios,
aunque uno de ellos no la haya mostrado abiertamente”.
“No… Sí que la
ha mostrado… – el caballero de la tierra sabía perfectamente a quien se refería
Mesa. Recordaba perfectamente el incidente de la Torre de Madera de Azeroth, y
ese recuerdo le bajó los ánimos mucho más que todos los golpes que había
recibido de Mesa durante el combate – Me la ha mostrado a mí…”
La sangre de la
reciente herida de su cabeza caía a través de sus mejillas como si fueran lágrimas.
Lágrimas de su corazón por darse cuenta una vez más de que a pesar de todo su
esfuerzo la diferencia de poder tanto con sus amigos como con sus enemigos seguía
siendo abismal.
“¡No! – Trató de
convencerse a sí mismo – ¡Yo he vencido a Arturo, el caballero del fuego, el más
poderoso de todos, para llegar hasta aquí! ¡Y ahora es el turno de que acabe
contigo!”
Sin embargo,
decir esas palabras no resultó eficaz, porque él mismo sabía la forma en la que
había ganado a Arturo. Una victoria es una victoria, sí, pero la verdadera
pregunta era donde estaba la línea que separaba la importancia de la victoria de
los medios por los que se había obtenido.
“Está dudando… De
esta forma no podrá activar su defensa crítica, ¡es mi oportunidad!”
Se lanzó contra
Fidel a toda velocidad. El caballero se dio cuenta de que su adversario se le
venía encima, pero reaccionó muy lento y apenas fue capaz de ponerse en
guardia. Sin mucha dificultad, Mesa le rompió la guardia de un puñetazo. Los
brazos del caballero fueron rechazados hacia atrás y su torso quedó al
descubierto y desprotegido.
“Se acabó el
juego, caballero – extendió el brazo hasta casi posar su mano en el pecho del
caballero, y una vez más, una bola de energía amarilla apareció delante de la
palma de la mano de Mesa – A partir de ahora vivirás dentro del caballero
negro, ¡¡Big Bang Attack!!”
Disparó la bola
de energía, y ésta arrastró el cuerpo de Fidel en línea recta, volando a ras de
suelo, en dirección opuesta al castillo de la Fiera Deidad. El cuerpo voló
hasta el final del claro, donde empezaba el bosque. Continuó avanzando, llevándose
varios árboles por delante, hasta que chocó contra una enorme roca que resistió
el impacto de la espalda del caballero, e instantáneamente el Big Bang Attack estalló tras un fuerte
destello.
La explosión
arrasó parte del bosque, y la onda expansiva arrancó varios árboles de cuajo y
los llevó volando hasta el claro donde se encontraba Mesa, ahora ya solo. Se
formó una cúpula de energía que consumió todo lo que estaba en su interior, y
al desvanecerse, el bosque había pasado a ser un yermo.
Mesa esperó a
todo se calmara, y una vez llegado el momento, caminó en busca del caballero. Lo
encontró en el epicentro de la explosión, tirado en el suelo, con hilos de humo
saliendo de varias partes de su cuerpo, respirando con dificultad, pero todavía
consciente y con aparentes intenciones de continuar.
“Ha recibido por
segunda vez el Big Bang Attack pero
todavía permanece consciente…”
“Jejeje…” Fidel
comenzó a reír él solo, sin un motivo aparente.
“Está delirando…
– pensó – Pero su elevada resistencia sigue siendo muy peligrosa”.
“Todos tenían
razón… A pesar de todo mi entrenamiento, sigo sin ser capaz de vencerte… No ha
cambiado nada…”
“Me alegro de
que a través de este combate hayas conseguido ver la luz. Mi trabajo como
profesor ha terminado. No obstante, ya es demasiado tarde para ti, y ahora
debes morir para convertirte en parte del Caballero Negro”.
>>“Si
recibes daño, puedes dormir, pero si haces daño, no podrás dormir – El
caballero de la tierra recordaba todas aquellas frases de advertencia que le
había transmitido su compañero – Es cierto que eres es más débil – Mientras
recordaba aquella palabras, Mesa percibió un cambio en la energía del caballero
– Convencerte no sirve de nada, así que voy a detenerte con mis propias manos”.
“Esto… Esto es
como aquella vez…”
El caballero de
la tierra continuaba haciendo memoria. Estar tirado en el suelo, boca arriba,
exhausto, y sin haber siquiera podido hacer frente a su adversario en igualdad
de condiciones, fue un reflejo de una parte de su entrenamiento.
>>Acababa
de caer la noche. Fidel había pasado una dura sesión de entrenamiento y se
encontraba tirado en el suelo, mientras Shawn espetaba sardinas en la hoguera.
>>“Eres
más fuerte que Mireia; sin embargo, sigues sin ser capaz de vencerla”.
>>“Sólo ha
sido… Mala suerte” susurró entre jadeos.
>>“No ha
sido para nada una cuestión de suerte. Como no haces un buen uso de tus
poderes, ella consigue que se vuelvan contra ti con su Eijuuken. Puede que
consiguieras tocarla para que te trajera hasta aquí, pero es un rival prácticamente
imposible de derrotar para alguien como tú, temperamental y fácil de provocar.
Recuerda que el caballero del hielo siempre ha conseguido vencerla con
facilidad, precisamente porque tiene un gran control no sólo sobre sus propios
poderes, sino también sobre sí mismo”.
>>“Bueno,
tampoco es que tenga mucho interés en derrotarla a ella precisamente”.
>>“No he
terminado. Tampoco eres capaz de vencerme a mí, aunque es cierto que ya
soportas muy bien mis golpes, eso significa que, como caballero de la tierra
que eres, tu característica que más se desarrolla es la resistencia, pero sólo
con eso no conseguirás nada. Sigues sin tener ninguna oportunidad contra mí, y
mucho menos, contra Mesa”.
>>“¿Tú
también? Empiezas a hablar como Arturo y los demás. Si vas a tocarte los
huevos, no te preocupes, me voy ahora mismo, ¡iré a por Mesa aunque tenga que
hacerlo solo!”
>>“De
nuevo, tu imprudencia te traiciona. Yo soy he hablado acerca de la realidad
actual, pero no he dicho nada de que no fuera a ayudarte”.
>>“Entonces,
¿crees que existe una manera?” Fidel levantó el tronco y se incorporó
activamente a la conversación.
>>“Está
claro que con un entrenamiento normal, tu resistencia continuará aumentando en
detrimento de tu capacidad de ataque, así es tu metabolismo, y eso no podemos
cambiarlo. Por tanto, tendríamos que modificar tu capacidad de ataque de una
forma irregular. Con eso, no es que pueda asegurarte la victoria, pero sí que
tendrías alguna posibilidad”.
>>“¡Perfecto!
– Sonrió lleno de esperanza – ¿Qué tengo que hacer?”
>>“Antes
de eso, debo advertirte que si decides aprender esta habilidad, has de saber
que tiene un coste muy alto para tu cuerpo, y que a pesar de que puede serte de
utilidad en el combate contra Mesa, puede acarrearte serias consecuencias de
cara al futuro”.
>>“Si no
derroto a Mesa, no tendré futuro… ¡Lo haré! No me importa lo que pase”.
>>Shawn
miró los ojos del caballero. Estaba decidido, pero no como una persona que
elige su camino mediante sus sueños y su ilusión, sino como alguien movido por
la tristeza y la desesperación que no tiene otro remedio. Shawn asintió con la
cabeza, y una repentina ráfaga de viento irrumpió en la isla, hasta que la
hoguera se apagó y los dos quedaron sumidos en la profunda oscuridad.
“Lo siento
Arturo… Tal vez debías ganar ese combate, pero ahora ya no hay vuelta atrás…
Tengo que ir hasta el final…”
“¿Qué ocurre? – Pensó
Mesa – Su energía está empezando a aumentar sin motivo aparente…”
El caballero de
la tierra comenzó a levantarse. A cada segundo que pasaba, su energía
continuaba aumentando. Cuando se puso totalmente de pie, un aura roja muy
intensa lo envolvía completamente.
“Es la hora… ¡Del
cambio de ciclo!” exclamó el caballero.
Curiosidades!!!
El Big Bang Attack es el ataque más poderoso de Vegeta.
Una serpiente que se arrastra por suelo y sueña con volar, será devorada por las garras del halcón es una frase que le dice Sasuke a Orochimaru, en la serie Naruto, antes de derrotarle, pues como se ve en la imagen, cuando se transforman, estos personajes representan a estos dos animales.
El fuerte siempre prevalece sobre el débil Esta idea era el lema de Makoto Shishio, uno de los antagonistas de Rurouni Kenshin
Veo que la inteligencia te persigue pero tú eres más rápido es una frase de Drippy, del videojuego Ni no Kuni y la Ira de la Bruja Blanca.
Como el gran profesor que soy es una frase habitual de Onizuka, protagonista de GTO, personaje que guarda muchas similitudes con Mesa a pesar de no estar basado en él.
Azeroth es el nombre de la tierra del videojuego Warcraft 2, y los nombres de los clanes de Más Allá de Los Caballeros, el clan Bleeding Hollow, ShadowMoon y StormReaver también son sacados de este juego.
Si recibes daño, puedes dormir, pero si haces daño, no podrás dormir es una famosa frase de Full Metal Alchemist que tiene especial relevancia en el personaje Scar.
El Castillo de la Fiera Deidad debe su nombre a la forma que adopta Link en The Legend of Zelda Majoras Mask al ponerse la máscara del mismo nombre.
Y bueno, algunas de las otras frases también son sacadas de algún lado, pero estaban en el borrador de Fidel vs Mesa desde hace años y ahora no recuerdo de donde eran :p
Una serpiente que se arrastra por suelo y sueña con volar, será devorada por las garras del halcón es una frase que le dice Sasuke a Orochimaru, en la serie Naruto, antes de derrotarle, pues como se ve en la imagen, cuando se transforman, estos personajes representan a estos dos animales.
El fuerte siempre prevalece sobre el débil Esta idea era el lema de Makoto Shishio, uno de los antagonistas de Rurouni Kenshin
Veo que la inteligencia te persigue pero tú eres más rápido es una frase de Drippy, del videojuego Ni no Kuni y la Ira de la Bruja Blanca.
Como el gran profesor que soy es una frase habitual de Onizuka, protagonista de GTO, personaje que guarda muchas similitudes con Mesa a pesar de no estar basado en él.
Azeroth es el nombre de la tierra del videojuego Warcraft 2, y los nombres de los clanes de Más Allá de Los Caballeros, el clan Bleeding Hollow, ShadowMoon y StormReaver también son sacados de este juego.
Si recibes daño, puedes dormir, pero si haces daño, no podrás dormir es una famosa frase de Full Metal Alchemist que tiene especial relevancia en el personaje Scar.
El Castillo de la Fiera Deidad debe su nombre a la forma que adopta Link en The Legend of Zelda Majoras Mask al ponerse la máscara del mismo nombre.
Y bueno, algunas de las otras frases también son sacadas de algún lado, pero estaban en el borrador de Fidel vs Mesa desde hace años y ahora no recuerdo de donde eran :p
1 comentarios:
Bueno por fin lo he leído, porque efectivamente no había comentario por eso. Muy muy interesante este capítulo, aunque quizás es una versión de Mesa un poco light, todo lo demás perfecto.
Lo único que podía hacer era confiar en que su entrenamiento y fuera suficiente (entrenamiento fuera)
Su cuerpo volvió a salir disparado, ahora hasta el extremo del claro en el combatían,(en el que combatían)
“Su defensa se ha manifestado cuando lo más necesitaba (cuando más lo necesitaba)
Mesa esperó a todo se calmara,(a que todo)
Es cierto que eres es más débil (el más débil)
Yo soy he hablado acerca de la realidad actual,(yo solo he hablado)
Un saludo a todos
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